miércoles, febrero 22, 2006

Reflexiones

Ayer el Canal 40 de televisión reinició transmisiones...fuera de lo espurio que siempre me ha parecido el contenido de ese canal, algo bueno resultó de todo esto: Ciro Gómez Leyva se quedó...chiflando en "el chiquihuite", lo que me alegra.
Desafortunadamente tomó el control un grupo igual de espurio: TV Azteca.
A CNI lo defiende Javier Quijano, abogado de López Obrador. TV Azteca claramente favorece al candidato del Sol Azteca. Curiosa paradoja. ¿Cómo se ha de resolver? Sólo Dios sabe.
Mientras tanto, Televisa está a punto de enfrentar su propio armagedón luego de que se dieran a conocer las presiones que esta televisora ha ejercido sobre miembros del Congreso y del Ejecutivo para la aprobación de la "Ley de Medios..."
Lo anterior me lleva a pensar que el tremendo escándalo que ha suscitado el caso Marin-Cacho, auspiciado notablemente por Televisa, no es sino otra forma de presionar a legisladores del PRI sobre la aprobación de la ley, y demostrar una vez más, quién es, no el cuarto, sino el primerísimo poder.