martes, enero 31, 2006

Sobre las relaciones

"No tiene ningún mérito portarse bien con otra persona. Tú tienes que ser amable con las personas del trabajo porque de otro modo no podrías trabajar allí. Nunca seremos capaces de establecer con seguridad en qué medida nuestras relaciones con l0s demás son producto de nuestros sentimientos, de nuestro amor, de nuestro desamor, bondad o maldad, y hasta qué punto son el resultado de la relación de fuerzas existente entre ellos y nosotros.
La verdadera bondad del hombre sólo puede manifestarse con absoluta limpieza y libertad en relación con quien no representa fuerza alguna. La verdadera prueba de la moralidad de la humanidad, la más honda, radica en su relación con aquellos que están a su merced, como los animales.

8 Comments:

Blogger Kadmus said...

Wow!interesantísima reflexión ¿es tuya? hay que replantear toda la teoría del acto moral desde ahí... mepones a pensar.


Saludos

10:54 p.m.  
Blogger Gustavo Villalobos said...

Hola amigo, no, ésta y la anterior son citas de "La insoportable levedad del ser".

Saludos.

7:03 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

Ama a Díos sobre todas la cosas.
Ama a tu prójimo como a ti mismo.
Díos: -Cómo dices amarme si solo amas al propio, ama al ajeno y me amarás a mi.

En primer lugar, recordemos el vasto campo semántico de la palabra amor. Se habla de amor a la patria, de amor por la profesión o el trabajo, de amor entre amigos, entre padres e hijos, entre hermanos y familiares, del amor al prójimo y del amor a Dios. Sin embargo, en toda esta multiplicidad de significados destaca, como arquetipo por excelencia, el amor entre el hombre y la mujer, en el cual intervienen inseparablemente el cuerpo y el alma, y en el que se le abre al ser humano una promesa de felicidad que parece irresistible, en comparación del cual palidecen a primera vista, todos los demás tipos de amor. Se plantea, entonces, la pregunta: todas estas formas de amor ¿se unifican al final, de algún modo, a pesar de la diversidad de sus manifestaciones, siendo en último término uno solo, o se trata más bien de una misma palabra que utilizamos para indicar realidades totalmente diferentes?

Cada persona plantea su teoría en base a lo que vive. Amar y dejarse amar por las personas ajenas nace no simplemente en personas bondadosas ni es cuestión de ética personal y mucho menos una gran nueva idea, amar en cualquiera de sus formas es un lenguaje fino, y se paga a un precio muy alto.

"Hacer a cada uno lo que con razón quisiéramos que nos hicieran a nosotros"

Saludos :)

11:31 a.m.  
Blogger Gustavo Villalobos said...

Visto en otra perspectiva, si el ser humano sólo puede mostrar su moralidad y humanidad de manera auténtica y sincera con aquellos que están a su merced como son los animales, entonces me empiezan a dar miedo aquellos quienes gustan de las corridas de toros, peleas de gallos, perros, etc. En el gozo al dolor de los animales se demuestra su verdadera moralidad, la cual ocultan en el trato con los hombres por la relación de fuerzas de que ya hablamos. En el fondo, me parecería que los aficionados a los toros, por ejemplo, son en realidad consumados misantropos, solo que reprimidos.

Esto si que ha sido todo un escurrimiento mental!

9:16 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

Milán Kundera me cae bien por anticomunista. Pero en lo que respecta a esa reflexión en particular, Kant ya había dicho que NUNCA se puede saber del todo si un acto es desinteresado, pues para ello debería estar excento, incluso, de la satisfacción interna que causa el obrar conforme al deber. Y algo es cierto, a mí me gusta más llevarme con gente de cualidades, que con personas insignificantes en todos los sentidos. Mea culpa.

1:19 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Exento, no excento

1:19 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Gustavo

Y donde dejas esos seres que ni siquiera ellos mismos se pueden amar? cómo aprender si no se aman a si mismos?

Desde el punto de vista de la reflexión, podríamos decir que el amor no existe? Si es así, puede ser lógico porque todo es un intercambio para hacer esta vida más cómoda. Damos porque recibimos, nunca he conocido a nadie que de sin obtener nada a cambio y sin que le nazca algún tipo de satisfacción.

4:05 p.m.  
Blogger Gustavo Villalobos said...

Hola Marimar:

Creo que te puede servir, pero mejor lee "El enamoramiento y el mal de amores" de Alberto Orlandini.

Ayudará mucho...lo prometo.

Saludos.

1:34 p.m.  

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